Si piensas que el derecho o los temas legales son demasiado aburridos como para que se pueda hacer un buen marketing con ellos, estás equivocado.

Todos, absolutamente todos los nichos de negocio que existen en el mundo pueden desarrollar su propia estrategia de marketing y adaptar el mundo publicitario a sus necesidades. Si este es tu caso y quieres que tu despacho legal llegue a más clientes, en este artículo te queremos enseñar las claves para que pongas en marcha un marketing jurídico efectivo.

El marketing jurídico o marketing legal, al igual que el resto de ramas publicitarias, tiene el objetivo de captar clientes, pero también de posicionar todo tipo de negocios relacionados con el mundo legal.

Su origen como tal se sitúa en Estados Unidos en la década de los 70, una época en la que a los despachos de abogados se les prohibía hacer publicidad (algo que también sucedía en España). Sin embargo, Van O’Steen y John R. Bates, dos abogados estadounidenses abrieron su propio bufete con el que querían llegar a personas con pocos recursos.

Eran conscientes de que, para que ese negocio fuera rentable, tendrían que llegar a mucha gente y decidieron arriesgarse pese a todo y poner un anuncio en el periódico. La Asociación de Abogados de Arizona les abrió un expediente sancionador, pero apelaron y al final consiguieron ganar, alegando el Tribunal que la prohibición de la publicidad para los abogados suponía mantener “al público en la ignorancia”.

A diferencia de antaño, actualmente el mundo del marketing legal es cada vez más competitivo y son muchas las firmas que se intentan hacer un hueco en el complicado mundo jurídico. Y es que, si hoy quieres llegar a clientes que buscan servicios legales, el marketing es fundamental. Pero no solo eso, una buena estrategia de márketing jurídico también es crucial para que una firma consiga ganar autoridad dentro del sector y fidelizar clientes.

Realmente, las estrategias de marketing que son efectivas para los despachos de abogados no distan mucho de aquellas que lo son para otro tipo de negocios, sin embargo, como todo sector, tiene sus peculiaridades. Lo único que hay que tener en cuenta es que, al desarrollarse dentro del mundo jurídico, las leyes al respecto pueden ser más restrictivas o inflexibles y es importante no perderlas de visita.