La revolución digital sigue avanzando a gran velocidad y las agencias de marketing Web3 basadas en tecnología blockchain y sistemas descentralizados se enfrentan a una importante pregunta: ¿deberían adoptar las estrategias de inteligencia artificial (IA) que han sido ampliamente adoptadas por sus homólogos en Web 2.0?
Agencias y conglomerados destacados como WPP, Publicis y Omnicom han incursionado en el campo de la IA y han invertido grandes sumas de dinero en ello. Su objetivo es aprovechar los poderosos conocimientos y eficiencias de la IA en la publicidad para transformar la forma en que las marcas se conectan con su audiencia.
Los argumentos a favor de la IA en la publicidad son sólidos. Accenture, después de realizar una inversión de 3 mil millones de dólares en IA, ha lanzado AI Navigator for Enterprise, una herramienta que utiliza IA generativa para ayudar a las empresas a integrar soluciones de IA. Dentsu, por su parte, ha firmado asociaciones estratégicas con gigantes tecnológicos como Google y Microsoft, lo que les da acceso a herramientas como GPT-4, la tecnología que impulsa ChatGPT. Utilizando estas capacidades y sus datos patentados, Dentsu ha creado su propio instrumento de inteligencia artificial llamado Merkle GenCX, diseñado para mejorar la gestión de la experiencia del cliente.
Numerosas agencias han adoptado la IA y cada una ha mostrado su propia innovación en este campo. Por ejemplo, Horizon Media ha presentado «Neon», una herramienta de IA destinada a optimizar las inversiones en medios para marcas de bienes de consumo empaquetados. Huge, por otro lado, ha desarrollado Creative Capital Index (CCI), una plataforma que utiliza IA para optimizar la creatividad interna de las marcas. MNTN ha lanzado «Viva», una solución publicitaria generativa impulsada por IA que permite a los clientes crear contenido de video fusionando imágenes de archivo con contenido generado por IA.
Grandes empresas como Google, Microsoft y Amazon también están liderando el camino en el ámbito del marketing impulsado por IA. Omnicom, aprovechando sus asociaciones con estas empresas, ha desarrollado la plataforma Omni, que sirve como centro central para capacidades generativas de texto e imágenes. Publicis, por su parte, ha revelado una inversión de 11 mil millones de dólares en tecnología de IA y ha desarrollado la herramienta de gestión de talentos de IA llamada Marcel.
A pesar de todos estos avances en IA, las agencias de marketing Web3 se enfrentan a un dilema sobre si adoptar o no estas tecnologías. Si bien estas agencias están arraigadas en sistemas descentralizados y han enfatizado la transparencia, la seguridad y la propiedad del usuario, la integración de la IA puede ser contradictoria con estos principios. Los beneficios potenciales de la IA en la publicidad, como la eficiencia, la personalización y la innovación, son innegables. Sin embargo, es importante que la integración de la IA no comprometa los valores fundamentales de la descentralización y la propiedad de los datos de los usuarios.
En resumen, la IA es una fuerza transformadora en la publicidad en la era Web3.0. Las grandes agencias han establecido un precedente en la adopción de esta tecnología y ahora las agencias de publicidad Web3.0 se encuentran en una encrucijada, reflexionando sobre cómo aprovechar el poder de la IA sin comprometer sus valores fundamentales. Es crucial que estas agencias sigan imaginando cómo estas herramientas pueden alinearse y amplificar las propuestas de valor únicas que ofrecen en el entorno digital descentralizado.